Descripción
Con un acercamiento inusual a un tema polémico por un escritor de ficción, antes que historiador, entramos en otro universo: el de construir una historia a partir de nociones nuevas, y reproducirla con datos objetivos dejando que razone su propios argumentos.
“Pertierra despierta los senderos de la curiosidad humana, esos que nos llevan a buscar en viejos papeles y reliquias, no por el afán de encontrar herencias escondidas como lo dibuja tan isleñamente una película cubana, sino por la necesidad de saber de dónde procedemos, qué mares trajeron a nuestros ancestros, de qué confín del mundo, qué sangre corre por nuestras venas, qué hacían los abuelos de nuestros tatarabuelos.” (Zenia Regalado)
Entre la Historia y la Leyenda
¿Qué encontraron los italianos a su llegada a estas tierras del poniente cubano?
Los italianos debieron vivir en el caserío levantado cerca del litoral sin tener contacto con los escasos pobladores de los feudos circulares existentes entonces, debido a su lejanía y dispersión. Es obvio su aislamiento durante la etapa inmediata a su llegada a Cuba; de lo contrario, nadie hubiera llamado Los Arroyos a aquel primer asentamiento nombrado Mantua por sus fundadores después de su abandono definitivo para instalarse en otro lugar. De acuerdo con diversas fuentes, en esta región se utilizó para el trasiego de mercancías entreLa Habanay las haciendas mantuanas, los surgideros de San Francisco, Santa Isabel, Baja y Los Arroyos. El primero en ser habilitado como embarcadero fue el de San Francisco, posiblemente en 1578, por su posición en la desembocadura del río Mantua y su proximidad al corral Cruces de Abalos. No obstante, lo intrincado y pantanoso de la zona terminó por dar al traste, ya a finales del siglo XIX, con su actividad económica. Los demás, excepto...
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