Operación Cohiba

2,10

Alberto Montuno, exagente especial, agrónomo de profesión, especialista en la calidad del tabaco, con un desarrollo excepcional en el olfato y el sabor, es enviado por el gobierno cubano a Alemania con la misión de investigar la fabricación y tráfico ilegal de puros de la marca Cohiba. Montuno va a intercambiar roles con su hermano gemelo que vive en Berlín y en apenas 14 días debe descubrir la fábrica e impedir el comercio a cualquier precio.

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Descripción

Pero nada es tan sencillo como parece. La presencia de su cuñada y sus sobrinos provoca varios incidentes inesperados, mientras el verdadero cabeza de familia estaba haciendo de las suyas en Cuba.

En Operación Cohiba no hay tiempo para respirar. Historia muy entretenida y ágil. Como en un thriller los hechos van ocurriendo a un ritmo impetuoso. Guevara nos deja una novela con un final inesperado que deja con ganas de saber más sobre esta historia.

Capítulo I. Un día antes en Cuba

Las campanas de la iglesia mayor repicaban y se escuchaban en cada rincón de la vieja ciudad, desandada por turistas que fotografiaban diversos monumentos. Algunos acudieron al llamado a misa, otros siguieron como encantados por el son que salía de La Casa de la Trova, donde resonaba la música de Compay Segundo. Cuando las campanas callaron su tañer, el ruido de un motor comenzó a escucharse cada vez más cercano. Era un helicóptero militar ruso que sobrevolaba la ciudad y en breves minutos alcanzó las cercanas montañas del Escambray, tapizadas por bosques, cafetales, cascadas y pozas de frías aguas de manantial. En la cabina, el piloto, con grados de Capitán, reguló el ruido de la radio y leyó las señales que lanzaba la pizarra. Su pasajero, Fernando Quintana, un General alto, de piel trigueña y pelo gris, escrutaba el paisaje. Tenía órdenes de buscar a un ex camarada de trabajo, oriundo de esta ciudad, que regresó a su tierra después...
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